¿Quién no quisiera dejar de ser pobre, por ser rico? Aunque sea por un día, tener lo deseado y dejar de soñar con lo imposible y hacer nuestros sueños realidad, dejar de tener problemas económicos y gozar de riquezas. Imaginen ganarse la lotería, en medio de una crisis monetaria y tener dinero hasta para regalar. Desde el punto de vista de un pobre ese seria la mayor bendición y felicidad, pero habría que preguntarle a un millonario si piensa igual, no han pensado ¿Qué hace feliz a un millonario teniéndolo todo?
Desde que un ser humano nace el objetivo es sobrevivir, después de sobrevivir es buscar las vías necesarias para seguir sobreviviendo, estas vías pueden ser; trabajo, familia, sacrificio para lograr las metas, levantarse diariamente con nuevas esperanzas y ser feliz con lo que se tiene sin embargo, un rico aun queriendo ser feliz no lo logra, porque ya según él, su felicidad la tiene y aun teniéndolo todo se siente vació, porque ya en la vida no tiene mas razones para luchar, mientras más dinero tenga más problemas tendrá, porque nada le será suficiente y esa soledad y ese vació estarán con el siempre haciendo que este caiga en depresión tarde o temprano.
Habría que analizar las numerosas muertes de varios personajes públicos, que caen en lo mas bajo, hasta quitarse la vida y muchos se preguntan ¿Cómo una persona con tanto dinero cayo en eso? Tenerlo todo a veces no es tan bueno como parece, no hay nada más satisfactorio que tener un equilibrio en todo, porque todo en exceso hace daño, hasta el dinero aunque no lo crean, y más cuando no se esta psicológicamente preparado para tenerlo. No hay persona que caiga más rápido en una crisis económica, que un pobre que de manera repentina obtenga dinero en abundancia y no sepa aun la carga que lleva, bien dice la Biblia: "Porque el amor del dinero es la raíz de todos los males: el cual codiciando algunos, se descaminaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores". (1 Timoteo 6:10)
Saberse administrar, balancear y no apegarse mucho al dinero, es la clave para un éxito económico seguro.
Victoria Ramírez
